Utilizar el agua en la higiene

Las rutinas de higiene personal y las tareas de limpieza del hogar o de la ropa han requerido tradicionalmente grandes cantidades de agua. Antiguamente, se empleaban barreños, aguamaniles o tinas de lavado para hacerlas posibles con el mínimo consumo.

Hoy estas acciones forman parte de nuestra vida cotidiana y las hacemos con otros tipos de objetos, como lavabos, lavadoras o cubos escurridores. Soluciones que, progresivamente, se deben ir adaptando a los criterios de sostenibilidad.